Y echamos carpetazo a nuestra canción de tocino y fritos con una entrega muy alejada, Nueva York, la ciudad donde si te lo propones probablemente puedas comer la mejor comida de todas partes del mundo, y obviamente las especialidades ultra gordas americanas también.
Desayunos en general
Si vas a viajar a la gran manzana y tienes reservado desayuno en el hotel hazte un favor a ti mismo y cancelalo. Una de las mejores cosas que se puede hacer en la ciudad es empezar a pasear, meterte en la primera deli o pastelería que te llame a la vista, y atizarte un desayuno de los que te dan para patear todo el día. Tienes de todo y todo esta de muerte (menos el puto café como viene siendo habitual): Sandwichs cubanos otra vez, bocatas de tortilla con queso metidos en bagels, pretzsels o cualquier forma de pan a la que le puedan echar guante. Pastelerías tanto artesanas de toda la vida como modernas que hacen cupcakes de colorines (de ambos tipos hay un par de sitios cojonudos en Brooklin justo antes de cruzar el puente). Todo riquísimo y todo contundente
Island Burgers & Shakes
Entre todos los manjares de este viaje igual os surge la duda de cual es el mejor, pues es éste. Y no solo es el mejor del viaje sino que es el mejor bocata que me he comido en toda mi puta vida negra. Presentamos el Churrasco Mona Lisa: unas pechugas de pollo a la plancha de nivel locura, acompañadas de pesto, cebolla caramelizada, champiñones, pimiento rojo, parmesano y mozzarella en pan chapata, todo ello con una calidad y cantidad de quitar el aliento. Para acompañar por si nos quedamos con hambre Chilli Cheese Fries, patatas fritas de nivel leyenda con queso, carnaza, salsa de tomate y frijoles. Pensándolo con detenimiento no sé me ocurren diez platos más ricos que haya podido probar en mi vida. Adicionalmente el sitio esta de puta madre, justo detrás del museo de historia natural (segundo mejor museo del mundo, y de la ciudad) en la 10th Av (Amsterdam), un lugar estrecho, pequeño y coqueto.
Pellegrino's
No es de los mejores italianos en los que he estado ni de cerca, Italia en si como país tiene mucha mandanga demasiado buena (Palinuro en Pavia, Cavaliere Nero en Pisa, Pisciapiano en Roma, etc, etc) y ya es difícil impresionarme con eso, el risoto estaba simplemente muy bueno. Pero los canoli de postre estaban tan de muerte que hubo que repetir, me sentí profundamente obligado a ello.
Sushi Masaru
Ya había estado en mi anterior visita y recordaba su pedazo bloque de sushi fantasía de langosta. Me apetecía repetir pero francamente me costó localizarlo de nuevo, ha cambiado, y para mejor, donde antes era un bar para gente guay ahora se ha vuelto más crudo y true, tienen a tres japos en la barra que no hablan de papa de inglés haciendo sushi delante tuyo a todo trapo. Combinaciones bastante fantasía, tapas experimentales gratis (recomendable la de erizos) y un tempura bien hecho y muy crujiente. Además a mi al menos me gusta bastante ver el proceso de elaboración de las comidas y el manejo de materiales de calidad (btw, tengo un vale de descuento para la próxima vez por aquí, por si alguien lo quiere)
Hearthland Brewery
Franquicia de cervecerías localizable fácilmente por todo el centro de Manhattan, cervezas de calidad sobresaliente acompañadas de contundentes hamburguesas y comida típica de pub (lease un bloque de angus beef de tres dedos de gordo cuyo interior aún esta mugiendo). Con las cervezas si no os importa poneros muy tontos tienen una oferta que puedes probar sus seis cervezas normales y dos de las especiales por un precio razonable (y bebiéndote dos litros de birra en el proceso).
Y con esto acabamos el viaje hasta la próxima. Reconozco que esta última entrada casi ha sido hacer trampas, porque tienes que proponértelo mucho para comer mal en Nueva York.