Canciones para vomitar los pulmones

Lo admito, me gusta correr, y no solo cuando se va a acabar la happy hour del pub, a pesar de que soy más lento que el caballo de malo me lo paso bien y como ya no tengo edad para ser una estrella del olimpismo (y además nunca he sido mucho de tomar drogas) pues tampoco pasa nada por ir despacico. 

Eso si, como para todo lo que hago en la vida, necesito motivación musical, así que he preparado unas cuantas canciones adecuadas para hacer cardio (esto es, escupir el corazón por la boca), con la particularidad de todas ellas tienen la palabra corazón en el título. Aviso, no es una playlist (al menos para mi) escucharselas todas seguidas corriendo implica estar corriendo mucho más rato del que yo podría sobrevivir. Son canciones sueltas con diversos ritmos (la mayoría bastante de subidón eso si, con algunas de tranqui para calentar o enfriar) que pueden ser combinadas de acuerdo a nuestras necesidades.

Ah, y una nota aclaratoria acerca de la música que normalmente la gente tiene en la cabeza cuando hablamos de música para hacer ejercicio: escuchar voluntariamente la "música" que ponen en los gimnasios me parece equivalente a meterme en 1943 con una sonrisa y un patito de goma en las duchas de Auschwitz-Birkenau. Así que la selección esta llena de rock y metal (con concesiones al pop clasiqueño), si no os gusta os buscáis un blog escrito por un jodido poligonero.

De bonus una canción que no está en spotify y si en google music, y que obviamente está en mi selección cuando quiero reventarme vivo. "Black at Heart" de Astarte, que con su mala hostia concentrada nos dispara a velocidades que no deberíamos ni plantearnos.

A destacar el principio suave con "Heart of Juliet" y la transición sin cambiar de cantante (pero si de grupo) a "Velvet Heart" mucho más rápida ideal para el calentamiento. Lo bien que sienta la música de los ochenta para correr (hombreras no necesarias) con esa combinación de alegría, horterismo, y épica con esa burrada de representación de la década que es "Total Eclipse of the Heart", tan necesaria cuando estamos a punto de palmar. Lo muñones que son Dragonforce pero al menos son rápidos, y como "Eagleheart" de Stratovarius mantiene el subidón de cualquier tema muy fácil. La velocidad que podemos coger con el punk irlandes, o lo bien que vienen el "Heart of Gold" para el enfriamiento.

¿Alguna sugerencia extra?

Feck Off!

La tradición de comedias británicas con un muy particular sentido del humor siempre ha tenido buena acogida en españa, en los ochenta y noventa porque las televisiones tenían programación variada y de calidad se importaron productos magníficos (Fawlty Towers, Black Adder, Mr Bean, Enano Rojo, The Young Ones, etc) aunque muchos de ellos a cadenas autonómicas. Y más recientemente con la explosión de internet a pesar de que las cadenas españolas no echan más que mierda a patadas ya no hace falta intermediarios para disfrutar de series notablemente más atrevidas que las americanas a la hora de hacer reír (IT Crowd, Little Britain, Extras, The Office). Pero quizás por estar en medio de estas dos oleadas, o quizás por ser una coproducción irlandesa y tener más complicado la distribución, quedó olvidada para el publico español una de las mejores sitcoms jamas realizadas en las islas: Father Ted. Voy a tratar de cambiar eso a ver si os consigo vender la moto de esta genial serie.

Bienvenidos a Craggy Island, pueblo de extremada mala muerte en la costa oeste de Irlanda, destierro impuesto por el obispado a los tres sacerdotes que forman la plantilla titular de la diocesis. El padre Jack, borracho, mujeriego, pendenciero, viviendo en un permanente estado alcoholizado que le concede algo parecido a superpoderes, cons sus constantes Fecks! (que da título a esta entrada). El padre Dougal, con la inteligencia de un saco de piedras y las habilidades sociales de un ficus. El protagonista de la historia, el padre Ted, pese a ser un ludopata y un estafador es el straigh man del reparto y nuestra identificación en la serie. Acompañandolos a todos está Mrs. Doyle, su asistenta con su interminable surtido de galletas y tazas de te reflejo de la abuela irlandesa cansina (que aparentemente es extremadamente  parecida a la abuela española cansina). Los cuatro forman el reparto fijo de la serie y juntos se enfrentan a problemas convencionales (la parroquia se queda sin dinero, crisis de fé y tentaciones de la vida eclesiástica varias), y a idas de tarro sin sentido ninguno (un monstruo que aterroriza a las ovejas, estrenos de películas polémicas, secuestros por parte de un maquiavélico lechero).

El humor, increíblemente absurdo, se basa en el uso magistral de varios niveles de irrealidad. El más básico que todos personajes aceptan (pero del que el espectador se descojona vivo) es que el mundo de la serie está lleno de instituciones, eventos y costumbres absurdas relacionadas con la iglesia católica: hay olimpiadas de curas, centros comerciales de curas, se comentan la habilidad de los diferentes sacerdotes para dar misa (con fans y espectadores que viajan para ver dar misa a Ted). Sobre este nivel básico se aplican capas y más capas de absurdo (hasta llegar a niveles directamente sacados de los mejores Monty Python que no siempre están compartidas por todos los personajes, generalmente Ted (siendo en cierta forma nuestros ojos y oídos) es el que menos niveles de irrealidad asume, lo que siempre le pone en situaciones comprometidas y embarazosas cuando el resto del reparto le deja atrás en su escalada de estupidez (el capitulo del cura Nazi es una leyenda).

Una consecuencia (claramente intencionada) de todos los niveles de absurdo en los que nos sumergimos, que da verdadero corazón a la serie, es que en ocasiones los sucesivos niveles se cancelan entre si para dar lugar a reflexiones extraordinariamente lucidas, verdades como puños cargadas de mala leche (no por ello menos ciertas) acerca del catolicismo en particular, la religión en general y el ser humano hablando de poco un todo ("I'm not a fascist, I'm a priest. Fascists dress in black and go around telling people what to do, whereas...priests... More drink!"). A lo que añado que si alguien se sintiera ofendido por la serie es que francamente se lo merece por creer en chorradas y (lo que es peor) tomárselas en serio.

En total 25 capítulos en tres temporadas (con el típico número de capítulos por temporada a boleo de las islas) más un especial de navidad que son autentico oro puro de comedia: escenas míticas, escaladas de consecuencias demenciales,  one liners devastadores. En la que desde hace un año para mi es una de las mejores comedias de todos los tiempos. Ayuda también que el canal 4 las repite hasta la saciedad y que (salvo en un par de excepciones) no haber linea de continuidad entre los capítulos (como en las sitcom verdaderamente clásicas) lo cual permite simplemente sentarte y disfrutar. ¿Opciones para verla? Pues recientemente el canal 4 ha puesto la serie entera en su canal de youtube en calidad excelente, pero me figuro que fuera del Reino Unido e Irlanda hará falta un proxy, si no siempre quedará el torrent y otros medios alegales. Y por si no lo veis del todo claro darle una oportunidad y ved solo un capítulo suelto a ver que tal, os recomiendo empezar por "Are you right there father Ted?" donde la genialidad de la serie se mezcla con lo políticamente incorrecto a muy malas.