Pues estaba repasando el nuevo single de "The Pretty Reckless" para ir anticipando el nuevo álbum que esta a punto de salir (un poco meh visto lo visto), y escuchando en google music la radio de temas parecidos me ha salido esta canción de la que me he enamorado sin remedio, por su simplicidad completamente cheesy pero también por su épica de tiempos pasados.
La responsable es Orianthi, una joven pero muy competente guitar heroine que ha ido buscando su propio estilo con un par de discos mientras iba ganando tablas como guitarrista de estudio y de directo para gente como Alice Cooper (vamos, que la señorita no es precisamente manca). Y el estilo que ha encontrado es una mezcla de letras ñoñas, resultones solos de guitarra y una reivindicación de la epicidad en la música. Y si, esta descripción encaja perfectamente con un género muy concreto, la power-ballad ochentera que tantas alegrías ha dado al mundo, tantos solos de air-guitar nos ha dejado ejecutar en bares y tanto desprecio ha sufrido a manos de gafapastas, hipsters y gilipollas despreciables del mundo entero. En resumen, de momento la moceta tiene tres muy decentes discos de rock con sabor vetusto actualizado llenos de amor (el ultimo un poquito más blues), aprovechad a escucharlos y empaparos bien antes de que a algún modernete indi de mierda hijo de puta le de por "rescatar" el estilo y tengamos copia de discos ochenteros trendies sin alma a machete.
La canción en si representa el estilo con la autoridad de un single perfectamente estudiado: todo estribillo, letras tontunas y chorradicas con la guitarra (lo de la guitarra se remarca con toda la chulería del mundo en el vídeo, sutilezas las justas). Un tema de los que te dan alegría y ganas de ponerte a hacer solos de air guitar como un imbécil en la parada del tren o por el pasillo del supermercado. Para escuchar más están los dos últimos discos en spotify, de los que ando algo yonki esta semana francamente.
La canción en si representa el estilo con la autoridad de un single perfectamente estudiado: todo estribillo, letras tontunas y chorradicas con la guitarra (lo de la guitarra se remarca con toda la chulería del mundo en el vídeo, sutilezas las justas). Un tema de los que te dan alegría y ganas de ponerte a hacer solos de air guitar como un imbécil en la parada del tren o por el pasillo del supermercado. Para escuchar más están los dos últimos discos en spotify, de los que ando algo yonki esta semana francamente.
