Si hay algo que nos gusta a los seres humanos casi por encima de todas las cosas, es poner a parir a personas, eventos o productos. Si además de ser seres humanos coincide que somos Españoles (a pesar de que pueda sonar incompatible a veces), nuestra capacidad de rajar adquiere tintes de orgullo nacional y de pintoresca costumbre. Si para rematar la faena, nos encontramos dentro de un grupo más o menos aislado y marginal, que en teoría tendría que hacer frente común frente a posibles criticas externas; entonces la capacidad de los miembros de ese grupo para despellejarse entre si empieza a ser legendaria. Todo esto viene a cuento de los eventos y reacciones en la escena metalera (española sobre todo) que rodearon al anuncio y presentación de la nueva cantante del grupo Sirenia, de los que voy a hacer un breve resumen porque es un tema que me interesó bastante en su momento.
Sirenia es una banda noruega de metal gótico-sinfónico, el principal y casi único motor de la banda es Morten Veland, uno de los fundadores de Tristania, que aparentemente al iniciar Sirenia quiso mantener su esquema de metal gótico dándole una nueva visión más comercial al conjunto. Los dos primeros discos del grupo, "At Sixes and Sevens" y "An Elixir for Existence", son bastante interesantes, con combinación de voces guturales masculinas y voces suaves femeninas, sumado a un fondo fuertemente sinfónico (coros, instrumentación clásica) y envuelto todo ello en tralla metálica de la buena. Desgraciadamente el tercer disco "Nine Destinies and a Downfall" rompió en cierta forma el equilibrio de los anteriores trabajos, quedando un disco plano, aburrido, ni lo suficientemente fuerte, ni lo suficientemente melódico, y, en general, un trabajo fallido para la banda.
Con este panorama, Morten decidió cambiar otra vez de vocalista femenina (habían salido a una por disco) especialmente después de que las críticas por el tercer álbum alcanzasen principalmente a la actual interprete, Monika Pedersen. Así que la banda, buscando una nueva voz, decidió hacer un casting multitudinario entre más de 500 chicas, tras un par de semanas de criba, Morten había hecho su elección, la nueva vocalista sería Ailyn, más conocida en su casa a la hora de comer por el castizo nombre de Pilar Giménez García (obviamente Española).
La afición nacional comenzó a afilar sus hachas ya que la carrera musical de Pilar era de lo más jugosa para ponerla a caer de un burro. Resulta que a la moza no se le ocurrió mejor idea que venir de participar en un concurso televisivo de triunfitos (
Factor X, para ser más concretos), y, por si esto no fuera suficiente para que el mar de cuernos patrio se rasgase las camisetas de los maiden, escarbando un poco más en el pasado de Pilar descubrimos que fue miembro de
Charm, grupo nacional que se dedicaba al Jpop y a versionear canciones de anime, vamos, una fricada como un piano y menos metálico que Marisol. Para rematar la faena Pilar domina fatal el inglés, así que la cosa esta clara: Morten esta borracho como una cuba y quiere hundir el grupo, solo ha escogido a Ailyn porque quiere trajinarsela y que vergüenza que sea esta zorra la que nos represente, mimimimimi.
Pasan ocho meses desde el fichaje de la nueva, y sale a la calle el cuarto álbum del grupo "The 13th Floor" y resulta que Ailyn (aparte de estar bastante buena) es una cantante cojonuda para Sirenia, el disco esta de puta madre, recupera la esencia de los dos primeros de la banda, superando el bache del tercero, y evoluciona la mezcla de conceptos original del grupo. Morten vuelve a ser más listo que el hambre, y todos los que rajaban se callan como putas. Y yo que me alegro, porque desde el momento que anunciaron su fichaje, comence a interesarme por la carrera de esta chica, y afortunadamente este viaje no me ha tocado estar en el grupo de los despotricadores, porque creo que la muchacha tiene talento y espero que le funcione el asunto lo mejor posible (eso si, también espero que siga practicando el inglés, que es donde más flojea, y eso que ha mejorado un huevo desde factor X).
